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El impacto del desarrollo científico y tecnológico en el cambio climático por Graciela García

El impacto del desarrollo científico y tecnológico en el cambio climático por Graciela García




Tengo un primo que, cuando era niño, decía que algún día limpiaría el aire con jabón. Debo confesar que en su momento me reí de su comentario, quizás porque me parecía poco realizable. Pero lo más sorprendente es que, a pesar de los años, aún no podemos decir que ya es una realidad. Esto me hizo pensar en qué se ha hecho con la ciencia y por qué todavía no tenemos este tipo de soluciones.

Las primeras evidencias científicas del cambio climático se remontan a 1950 [2]. A pesar de que se ha avanzando exponencialmente en el desarrollo científico y tecnológico, a partir del cual, hoy es posible contar con herramientas para tener más información del medio ambiente, también es cierto que la ciencia ha contribuido de manera perjudicial al medio ambiente. Lo preocupante es que, a casi 70 años de saber del tema, los esfuerzos no parecen ser los suficientes para erradicar el cambio climático.

Al realizar una investigación bibliográfica, encontré que se invierte más en actividades relacionadas con combustibles fósiles y otras fuentes de emisión de gases invernadero, que en esfuerzos de mitigación o adaptación. Por ejemplo, la Agencia Internacional de Energía reportó que en 2018, los subsidios de combustibles fósiles alcanzaron los 400 millones de dólares, más del doble de lo destinado a energías renovables [8]. Pese a esto, se estima que las soluciones de adaptación al cambio climático retornen más de 4 veces el monto invertido [1], de acuerdo con proyecciones de la Comisión Mundial para la Adaptación del Cambio Climático o como lo indica Project Drawdown se podrían ahorrar, a largo plazo, cerca de 143 millones de dólares por el uso de tecnologías como LEDs, paneles solares o autos eléctricos [5].

Entonces, si económicamente es más atractivo atender los problemas resultantes del cambio climático ¿por qué no se le está prestando más atención? Este tipo de contradicción se observa en muchas situaciones, incluso en muchos países. Por ejemplo México, en el que desde el 2012 entró en vigor la Ley de Cambio Climático y que en el 2020 destinó la cifra más alta en los últimos años en acciones para adaptar y mitigar el cambio climático [6]. Pero al mismo tiempo, este año, el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) frenó el desarrollo de proyectos de energía renovable [3] y también mantuvo el monto destinado a investigación “la inversión equivalente al 0.33% del producto interno bruto (PIB), la más baja en 20 años” [4]. Es tan evidente esta paradoja, que en la misma ciencia hay un desequilibrio en los esfuerzos destinados a ciencias tecnológicas y ciencias sociales que, aunque no es el objeto de este artículo, vale la pena mencionar el ejemplo de Overland y Sovacool (2019) quienes mencionan que la inversión destinada entre 1990 a 2018, para atender el cambio climático, otorgada al área de ciencias naturales y físicas fue de 40 mil millones de dólares en comparación con los 4.6 mil millones para ciencias sociales y humanidades. Lo que podría explicar por qué se ha avanzado más en tecnología que en políticas públicas o cambio de hábitos de consumo responsable en la sociedad.

Hay muchas más evidencias de la influencia de la ciencia en el cambio climático y podrían salir tesis sobre el desempeño de la ciencia en el tiempo. Sin embargo, el objetivo de este ensayo es poner en perspectiva algunas cuestiones que pasan desapercibidas, ya que pareciera que se hace ciencia por hacerla y es momento de alinear los esfuerzos.


Es por ello que los invito a reflexionar que ha pasado casi un siglo desde que se conoció del cambio climático y a la fecha no contamos con suficientes soluciones para hacerle frente. También a que es económicamente factible y más rentable apostar por estrategias preventivas que reactivas ante el cambio climático .

Asimismo los invito a que replanteemos las prioridades de investigación y a que, así como el coronavirus logró enfocar los esfuerzos para dar soluciones rápidas, el cambio climático sea la siguiente “pandemia” que guíe los esfuerzos de investigación y para el que también tengamos ese tipo de respuesta.

Termino con un llamado a la acción para que incentivemos la ciencia con impacto, incluyente, accesible, en la que no dejemos a nadie atrás y que nos sumemos a otros que dicen que esto es un imperativo, que no podemos dejar pasar más tiempo, porque podríamos empezar con limpiar el aire con jabón en lugar de tener que buscar otro planeta.

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About the Author

Graciela García (@chelagalo) es Ingeniera en Biotecnología y cuenta con más de 7 años de experiencia profesional en gestión de proyectos. Actualmente estudia la Maestría en Gestión de la Ingeniería, trabaja como Coordinadora de Programas de Incubación con enfoque en empresas de base tecnológica y también es Coordinadora Regional en SDSN Youth México. Le interesa la democratización y la divulgación de la ciencia como solución a los problemas actuales y como catalizador del desarrollo económico y social.



References

  1. Guerrero, T. (10 de septiembre de 2019). Invertir en la adaptación al cambio climático genera cuatro veces más beneficios. Obtenido de El mundo: https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/ciencia/2019/09/10/5d778815fc6c83da0e8b4689.html

  2. History. (20 de abril de 2020). Climate Change History. Obtenido de History: https://www.history.com/topics/natural-disasters-and-environment/history-of-climate-change

  3. Infobae. (18 de mayo de 2020). Endurecer reglas energéticas favorece a la CFE y afecta a proyectos renovables en México: Wall Street Journal. Obtenido de Infobae: https://www.infobae.com/america/mexico/2020/05/18/endurecer-reglas-energeticas-favorece-a-la-cfe-y-afecta-a-proyectos-renovables-en-mexico-wall-street-journal/

  4. LJA.MX. (27 de mayo de 2020). MÉXICO REQUIERE MAYOR INVERSIÓN EN CIENCIA, TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN. Obtenido de LJA.MX: https://www.lja.mx/2020/05/mexico-requiere-mayor-inversion-en-ciencia-tecnologia-e-innovacion/

  5. Nuccitelli, D. (26 de marzo de 2020). Aggressive action to address climate change could save the world $145 trillion. Obtenido de Yale Climate Connections: https://www.yaleclimateconnections.org/2020/03/aggressive-action-to-address-climate-change-could-save-the-world-145-trillion/

  6. Ortega, A. (26 de enero de 2020). México destina la cifra más alta en seis años contra el cambio climático. Obtenido de Expansión: https://politica.expansion.mx/mexico/2020/01/26/mexico-destina-la-cifra-mas-alta-en-seis-anos-contra-el-cambio-climatico

  7. Overland, I., & Sovacool, B. K. (abril de 2020). The misallocation of climate research funding. Obtenido de ScienceDirect: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S2214629619309119

  8. Yeo, S. (17 de septiembre de 2019). Where climate cash is flowing and why it’s not enough. Obtenido de Nature: https://www.nature.com/articles/d41586-019-02712-3

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